BLOQUE 4: ORTOGRAFÍA Y SEMÁNTICA.

Conocer la lengua, bloque que aparece en el currículo de Educación Primaria, implica adquirir un buen vocabulario, y conocer lo básico de la gramática, además de saber aplicarlo, para conseguir un buen uso de la lengua castellana. Esto favorecerá a las cuatro destrezas básicas, que son hablar, escuchar, leer y escribir.

Este bloque se centra en dos aspectos fundamentales para lograr una buena expresión y comprensión: ortografía y semántica.

• Ortografía:

Se trata del conjunto de normas que rigen la representación a la hora de escribir. Durante la etapa escolar, los niños se encuentran con dificultades, relacionadas con tener que respetar las particularidades ortográficas. Estas son las grafías y la ortografía de la palabra. Dentro de la primera, se encuentran las equivalencias fonológicas, las grafías representadas por un mismo fonema, una misma letra que representa dos fonemas, y, al contrario, dos letras con un mismo fonema. En la segunda dificultad están la acentuación, las peculiaridades léxico-ortográficas, de acentuación, palabras con doble acentuación, las mayúsculas, el guion de las palabras compuestas y las normas de flexión y derivación. Por último, dentro de la ortografía de la frase tenemos la mayúscula al principio de la frase, la separación de las sílabas cuando se acaba el renglón, y los signos de puntuación y las notas auxiliares.

En este período, a los niños les cuesta dominar las nociones lingüísticas de la ortografía, ya que muchas provienen de la evolución del castellano, de otras lenguas que nos han legado préstamos lingüísticos.  

Uno de los errores que cometemos con los niños es pretender que se aprendan de memoria estas reglas, cuando realmente la ortografía se adquiere de manera visual, viendo esas reglas escritas de manera correcta. Estudiarlas no sirve de nada. En mi caso, apenas tengo faltas ortográficas, pero tampoco recuerdo exactamente esas reglas que me hicieron aprender de memoria. Esto es porque a lo largo de los años he visto todas esas normas en diferentes formatos, en libros, en carteles, etc., que ha hecho que las haya interiorizado y que ahora al escribirlas lo haga de forma correcta. Las claves para trabajar la ortografía son la atención, la memoria visual, y el uso funcional de la ortografía. Pero sin ninguna duda, la base fundamental de esta es la motivación de los alumnos, y esto en gran parte se consigue reforzándolos de manera positiva. Un buen método para corregir las faltas es, a la vez que les corriges en rojo lo que han escrito mal, escribirles en otro color lo que han escrito correctamente, así pueden ver que, aunque se hayan equivocado, también han acertado en otras.

Hoy en día se puede observar a mucha gente que escriben mal muchas de las palabras que utilizan. Yo creo que una parte de culpa la tiene la manera en que han aprendido esas reglas, ya que como he dicho, la gran mayoría se estudian de memoria, lo cual no sirve para nada, no solo en la ortografía, sino que es así en todas las asignaturas del aula. Por ello, he decidido orientar mi actividad hacia una de las reglas que se confunden con frecuencia, y al trabajarla con los niños, las aprenderán de una manera más significativa.

• Semántica:

Dentro de este apartado, diferenciamos dos términos: la semiótica, y la semántica.

La semiótica o semiología se refiere a los procesos de los sentidos de cualquier señal, en un contexto social o cultural determinado. Por ejemplo, los iconos se utilizan en la prelectura. Los alumnos tendrán que ser capaces de entender, interpretar y dar sentido a mensajes verbales y no verbales. Por otro lado, la semántica se refiere a estudiar el significado e interpretar los signos lingüísticos, incluyendo las frases hechas, expresiones, y figuras relativas al significado en un contexto determinado.

La RAE define vocabulario como “conjunto de palabras o vocablos que constituyen una lengua”. Dentro de este general, encontramos dos tipos de vocabulario, el pasivo y el activo. El vocabulario activo es el que utilizamos como emisores, y el pasivo no lo utilizamos, pero sabemos qué significa. En las aulas se debería trabajar estos dos tipos, para aumentar la riqueza lingüística de los niños, ya que los niños escuchan y ven muchas palabras que no conocen su significado. Por tanto, trabajando esto en las aulas abrirá las puertas del conocimiento de nuevas palabras a los niños, y que en un futuro sean capaces de manejar gran cantidad de palabras y no se limite siempre a las mismas. 

En este bloque hemos desarrollado dos actividades para trabajar estos términos, una para trabajar la semántica, y otra para trabajar la ortografía.

Ambas actividades van a estar dirigidas para tercero de primaria, ya que, según el currículo de primaria, en este curso los alumnos deben aplicar correctamente las reglas ortográficas aprendidas previamente. De todas estas reglas, yo he elegido hacer en primer lugar la regla de la b/v. He decidido hacer esta regla porque creo que es de las más difíciles de interiorizar, ya que suenan igual las dos. De esta manera, los alumnos podrán saber qué palabras se escriben con b y cuáles se escriben con v.

“PASOS Y PASOS…”.

PREPARACIÓN:

Objetivos:

• Aplicar correctamente la regla ortográfica de la b y la v.
• Reconocer las letras b/v en palabras escuchadas.
• Saber cómo se escriben palabras cotidianas.

Materiales:

Para esta actividad, no se necesita ningún material en concreto.

Esta actividad se llevará a cabo en el patio o en el gimnasio del centro, para poder tener más libertad para moverse, ya que en los patios realizan juegos muy dinámicos. Así, esta actividad les resultará más divertida y motivadora. Se colocarán los alumnos en una fila. Esta actividad es muy similar al “escondite inglés”, solo que, en lugar de la famosa frase, el profesor recitará diversas palabras que pueden contener la letra b o v. Cada vez que el profesor recite una palabra que contenga b, darán un paso adelante. Si la palabra dicha contiene una v, el alumno dará un paso adelante con un brazo hacia arriba. Si la palabra dicha no contiene ninguna de estas dos letras, el alumno permanecerá en su sitio. En el posible caso de que la palabra contenga ambas letras, los alumnos avanzarán dos pasos con el brazo arriba, y a continuación deberán decir cómo se deletrea la palabra, y si aciertan, dan un paso más, si no, lo darán hacia atrás. Si se equivocan en cualquiera de estas normas, retrocederán un paso. 

Ganará quien llegue primero al lugar del profesor, y podrá ser quien dicte las palabras la siguiente ronda.

PUESTA EN PRÁCTICA:

Antes de empezar les preguntaremos si conocen cuándo se escriben las palabras con b y con v. Esto les introducirá a los alumnos el tema que vamos a trabajar y a nuestro objetivo principal. A continuación, les explicaré en qué consiste a actividad, de forma clara y de manera que todos lo entiendan para que nadie se quede descolgado del resto. Antes de empezar a jugar, haremos una pequeña prueba, y les diré las palabras: bravo, bonito, velero, buitre y viento.

Después, comenzaremos la actividad, donde cada alumno podrá aprender de sus compañeros si ellos mismos no saben cómo se escribe. 

EVALUACIÓN:

Cuando llevemos a cabo la actividad, les preguntaremos a los alumnos qué les ha parecido, si les ha resultado difícil, si mejorarían algún aspecto, o cualquier comentario que quieran hacer. Así, aunque el maestro es quien realiza la actividad, es bueno que reciba un feedback para así poder mejorarla, y adaptarla a sus capacidades, gustos y necesidades. De esta manera estaremos conociendo a nuestros alumnos para que posibles futuras actividades estén adaptadas a ellos, y estén más motivados a aprender. También les vamos a preguntar para qué creen que ha servido la actividad, qué finalidad ha tenido, y finalmente les contamos cuál era los objetivos principales.

Además, después de cada palabra, les preguntaremos a cada uno qué palabra conocían y cuál desconocían, y cómo han sabido qué letra aparecía en la palabra, compartiendo esas estrategias con el resto de sus compañeros.

“CÓCTEL DE LETRAS”.

PREPARACIÓN:

       Objetivos:

•    Unir letras formando palabras que tengan sentido.
•    Activar el vocabulario pasivo.

Materiales: Hojas cuadriculadas, bolígrafo, fichas con las letras.

Esta actividad se llevará a cabo en pequeños grupos, ya que a los alumnos les gusta más esta manera y se sienten más cómodos. Para darle un poco de emoción al juego, vamos a establecer unas reglas de puntos. Para empezar, se realizarán grupos de tres alumnos, para que puedan participar todos dentro de cada uno. A cada grupo se les dará una hoja con un esquema como este, siendo cada grupo uno diferente. 

Entre los miembros del grupo tendrán que formar palabras y rellenar el crucigrama que aparecen en otra ficha. Hay la posibilidad de encontrar palabras que no cojan en los espacios de las palabras cruzadas, que valdrán el doble de las que sí caben. Además, estas palabras irán destinadas al cofre de las palabras extra. Cuando acaben de encontrar las palabras que puedan, rotarán las fichas de los esquemas, y les entregaré el crucigrama correspondiente a cada esquema. Cada vez que formen una de las palabras del crucigrama, recibirán un punto en forma de estrella. Recordamos que las palabras extra valen 2 estrellas. En el caso de que no sean capaces de encontrar una de las palabras obligatorias (las que rellenan los crucigramas), podrán canjear las estrellas de la siguiente manera:

• Recibir el significado de la palabra que falta: 4 estrellas. 
• Eliminar una de las letras que sobren: 2 estrellas.
• Eliminar todas las letras que sobren: 4 estrellas.

Una vez que todos hayan resuelto todas las fichas, se pasará a otra ronda más difícil, donde habrá una mayor cantidad de letras que unir y de huecos que rellenar en las palabras cruzadas.

PUESTA EN PRÁCTICA:

Antes de empezar la actividad, les preguntaremos a los niños si alguna vez han jugado a las palabras cruzadas, y si conocen algunas palabras que contengan las mismas letras, pero en distinto orden, y cuáles son. Esto les activará para empezar a jugar.

 A continuación, les explicaré en qué consiste a actividad, de forma clara y de manera que todos lo entiendan para que nadie se quede descolgado del resto. Vamos a hacer un crucigrama entre todos de prueba, para ver si lo han entendido, y si es así que ensayen una vez antes de empezar de verdad. El ejemplo que haremos será con las letras: C, A, R, O, Y formaremos las palabras: caro, oca, aro, arco y ora. Después les explicaremos que tienen que colocar las palabras en las filas o columnas que tengan el mismo número de huecos que letras la palabra. Aquí es cuando observarán en qué consiste el cofre de las palabras extra.

Finalmente, empezaremos la actividad, dividiendo de manera aleatoria a la clase en grupos de tres alumnos, porque si hacemos grupos grandes corremos el riesgo de que haya gente que no participe, y queremos que participen todos. Mientras se desarrolla la actividad, el profesor recorrerá cada grupo por si existiese alguna duda, y para ir observando cómo funcionan los grupos, y para poder evaluar a los alumnos más tarde.

EVALUACIÓN:

Cuando llevemos a cabo la actividad, les preguntaremos a los alumnos qué les ha parecido, si les ha resultado difícil, si mejorarían algún aspecto, o cualquier comentario que quieran hacer. Así, aunque el maestro es quien realiza la actividad, es bueno que reciba un feedback para así poder mejorarla, y adaptarla a sus capacidades, gustos y necesidades. De esta manera estaremos conociendo a nuestros alumnos para que posibles futuras actividades estén adaptadas a ellos, y estén más motivados a aprender. También les vamos a preguntar para qué creen que ha servido la actividad, qué finalidad ha tenido, y finalmente les contamos cuál era los objetivos principales.

Sin embargo, después de cada ronda, les preguntaremos a cada grupo qué letras les ha costado más unir, y qué estrategias han utilizado para solucionarlo. 

CONCLUSIÓN:

WEBGRAFÍA:

Labajo, I. (2018). Didáctica de la Lengua española. Madrid. CSEU La Salle.